Comentario
Estilísticamente, la arquitectura zapoteca se diferencia por una combinación peculiar de talud y tablero, una concepción decorativa de gran distribución en Mesoamérica, en un esquema que se mantiene a lo largo de su secuencia mediante un estilo propio y distintivo: espacios cerrados en plazas hundidas, donde se colocan basamentos de altura intermedia decorados por medio de un muro inclinado (talud) y otro recto (tablero) abierto en su parte inferior para formar un diseño invertido en forma de U.
Se inicia la construcción de tumbas rectangulares colocadas bajo los edificios, las cuales se cubren con losas planas de piedra. En ellas se coloca a los líderes de la ciudad, y se acompañan con ofrendas de cerámicas grises de pasta fina en forma de cuencos trípodes y vasijas de asa estribo.
Otros centros como Zaachila, Yagul y Dainzú construyen grandes estructuras que recuerdan el estilo de Monte Albán y también tallan Danzantes, pero esta vez integran en estas esculturas en bajorrelieves figuras de sacerdotes, jugadores de pelota con sus atavíos, yugos, guantes, etc.
Desde el punto de vista arquitectónico, la actividad más importante es la construcción del Montículo J al sur de la Plaza Principal. Es una estructura en forma de flecha interpretada como un observatorio astronómico, aunque no hay que olvidar que contiene 40 losas talladas con Danzantes de similar factura a las ya comentadas.
Es decir, que desde Monte Albán irradia una tradición escultórica con funciones de integración política e ideológica. También paralela pudo ser la construcción de juegos de pelota que, al menos en el caso de la capital zapoteca, ponen de relieve la práctica de rituales regionales. Otro acontecimiento de importancia es el desarrollo del sistema escrituario y aritmético relacionado con el poder y con cálculos calendáricos, distribuido desde Monte Albán a otros sitios como Caballito Blanco, para registrar batallas, fechas y nombres de lugares.
Se inicia una excelente tradición en el trabajo de arcilla, apareciendo efigies huecas de bulto redondo que representan figuras humanas y de animales, donde son corrientes jaguares asociados a tumbas. Además de una variada gama de cerámicas utilitarias y de lujo se hacen asimismo frecuentes grandes urnas modeladas en forma de efigies de señores y divinidades colocadas en tumbas, que tendrán una gran aceptación en el valle durante el Clásico.